
Que triste es saber que tu único respaldo, los que nunca te van a dejar, los que te aman por sobre todas las cosas, los que se enorgullecen por tus logros, los que dicen te aceptan tal y cual eres, por lo que estas donde estas y luchas para llegar mucho mas alto, por los que darías tu vida, deciden ya no confiar en ti y sentirse ofendidos por tu actitud.
Aun no lo puedo entender, por que de un momento a otro me dieron la espalda, porque me engañaron durante tanto tiempo creyendo que todo estaba bien, es injusto sentirse confiada y luego te quitan la alfombra de un tirón y caes en la realidad cruda y deprimente.
Siempre hice lo que ellos quisieron, a regañadientes pero al final lo que querían, los ayude sin pedir nada a cambio, los tenia presente cuando iba a tomar una decisión, esperaba una palabra de aliento cuando sentía desfallecer, les contaba mis problemas, saque fuerzas de donde no había para soportarlos en sus problemas caseros, en fin, todo que colaborara con su finalidad para que al final me juzguen, me hagan sentir mal, eso no es justo.
Nunca había sentido tanto dolor, tanta cólera, tanta frustracion, estaba sola, con un grito ahogado, con san martincito de espaldas, me sentí tan decepcionada, mis esfuerzos no habían servido de nada, mis explicaciones eran vacías, mis lágrimas no conmovian, peleaba contra bloques de hielo que me miraban por encima, que me despreciaban.
Cada vez que recuerdo esos instantes eternos siento un nudo en la garganta, una sensacion de vértigo que me hace temblar.
Ahora cada vez que llego a casa, me parece que ya no pertenezco ahí, creo que es el llamado a la realidad, yo ya no pertenezco a ese lugar, yo ya no formo parte de ese ambiente, ya nada es mio, ni las paredes, ni la puerta, ni las llaves que cargo en la cartera, todo es prestado.
Necesito buscar una nueva razón para seguir, buscar una nueva motivacion que me haga seguir, lo siento por mi padre que fue el único que me apoyo, pero el entenderá que ahora es mi decisión.